Ferguson ya está muy enfadado con Cristiano

"No acepto que regale balones al contrario por cómo juega", dijo.



Alex Ferguson nunca dice nada por casualidad. Ni siquiera aquellas veces en que parece que la pregunta es la que dicta el sentido de sus palabras. Siempre sabe por dónde van a tirar los periodistas y es consciente de cómo dirigir la agenda. Lo que queda en manos del lector es la interpretación de lo que suelta. Después de defender a Cristiano Ronaldo en la conferencia de prensa anterior al partido ante el Oporto (en la que llegó a calificar de "patético" a un periodista por hacer su trabajo y preguntar al portugués si estaba a gusto en su club), aprovechó su última aparición pública para todo lo contrario. Ferguson ha dejado caer que Cristiano debe cambiar, que no va a aceptar más su arrogancia, sus desplantes en el campo, sus quejas a menudo injustificadas. Y sobre todo la falta de intensidad de su juego, que le ha costado dos tantos a su equipo ante el Aston Villa y también en la Champions.
"No acepto que regale balones al contrario por su manera de jugar", ha dicho Ferguson. "He hablado con él sobre esto. Y no lo acepto de nadie Él cree que no tiene la protección adecuada de los árbitros y creo que a veces tiene razón. Pero hay muchas veces que no es así". La crítica del escocés fue más allá del estilo de juego: "Es duro cuando un jugador que siempre quiere entretener no puede conseguirlo a su manera. Pero no todo se puede lograr como uno quiere".
Momento elegido.
Pero, ¿por qué ahora? En parte, se dice, porque el equipo se ha dormido. Se relajaron todos cuando se calificó al Manchester de invencible (Wenger, siempre el último de la cola a la hora de enviar elogios de camino a Manchester, fue esta vez el primero con el objetivo claro de dormirles) y en el último mes todos han estado por debajo de sus posibilidades. Evra, Vidic, Van der Sar, Scholes, Carrick, pero por encima de todos Cristiano. Creían haber ganado la Liga antes de tiempo y Ferguson entiende que necesitan una reprimenda. Otros prefieren analizarlo en clave madridista. ¿No será que el escocés está empezando a despedirse del portugués? Algo así hizo con Ince, Van Nistelrooy, Stam o Beckham antes de venderlos; criticarlos para dirigir la opinión pública a una conclusión favorable al United: tenían que ser vendidos, se decidió por unanimidad.Para estos últimos, existe otro dato esperanzador que se añade al acuerdo que existe entre el futbolista y el club blanco. El Manchester debe pagar unos 1.100 millones de euros de deuda en los próximos nueve años. A no ser que los Glazer refinancien el préstamo o tomen decisiones drásticas, los números rojos podrían comerse al United. Según la prensa británica, los Glazer podrían verse obligados a vender a sus grandes jugadores. Y por eso contemplan con buenos ojos una súper oferta por Cristiano que podría parar el primer golpe y evitar, de momento, lo peor: hay al menos tres grandes grupos que estarían dispuestos a comprar el club si los americanos no lo saben manejar adecuadamente.
Y finalmente, para los que quieran convertir esto en el primer paso de Cristiano en su camino hacia Madrid, un último dato esperanzador: Ferguson está dispuesto a hacerse con los servicios de Luis Antonio Valencia, del Wigan, y ya cuenta en sus filas con Nani y los nuevos fichajes de Zoran Tosic y Adem Ljajic, dos serbios que costaron 16 millones de euros, todos ellos habituales de la derecha. Ya hay en la plantilla sustitutos del portugués.
¿El futuro?
Pero además empieza a surgir la figura del italiano Federico Macheda. A sus 17 años es la sensación del Manchester, ya que ha marcado dos goles in extremis en las últimas dos jornadas que ha dado seis puntos decisivos a su equipo. Por ese motivo, la directiva ha subido el sueldo de su futuro crack: de 450 a 11.000 euros a la semana.

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