Si es cierto que el ex jugador de la cantera azulgrana está en la lista de Pep Guardiola con vistas a la próxima temporada, pero su alto precio (70 millones de euros que pide el Arsenal, club que parece no estar dispuesto a hacer ninguna rebaja) hace inviable que se lleve a buen puerto la operación.
Lo que sí nos consta que es que Fernando Torres esta loco por vestirse de azulgrana, que arde en deseos de dejar el Liverpool una vez que su valedor, el técnico Rafa Benitez haya tomado la decisión de abandonar el club inglés y fichar por el Inter y que ya ha dado órdenes estrictas a su representante que le busque un equipo y que si éste es el Barça, mucho mejor.
Fernando Torres tiene un contrato de siete millones de euros, libres de impuestos, que nada tiene que ver con los diez que cobra Ibrahimovic, lo que supondría un ahorro económico para el club azulgrana, amén de salir ganando deportivamente hablando, pues el Barça podría entonces contra con la mejor dupla atacante a nivel nacional: Villa/Torres, que sin lugar a dudas haría estragos si a su lado colocamos a Leo Messi. En la recámara estarían Bojan y Pedrito, otros dos jugadores que están que se salen.
La renovación de Alves se complica por momentos. Hace poco más de una semana informábamos que Txiki Begiristain y el entorno del jugador habían mantenido un primer contacto para sentar las bases de la ampliación y mejora de contrato del futbolista. El club entiende que el brasileño ha hecho méritos más que suficientes para una mejora económica y dos años más de contrato. De entrada, la oferta del club era bien acogida por parte de Dani y su familia. Era cuestión de esperar unos días y comprobar cómo se cristalizaba sobre el papel las promesas azulgrana.
El asesor jurídico de Dani Alves ya tiene el borrador del que debería ser nuevo contrato del brasileño. Sin embargo, la oferta tramitada por el club no ha cubierto las expectativas originadas en su día. Efectivamente, el Barça propone dos años más de contrato al jugador y un aumento respecto a su actual ficha, pero desde el entorno de lateral azulgrana se estima que la mejora presentada por Txiki no se ajusta a la realidad económica que impera en el vestuario culé.
El secretario técnico del Barça ya está al corriente del desencanto provocado por su primer ofrecimiento. Se aceptan los dos años más de contrato pero se entiende que el club todavía debe incrementar las cantidades. Alves es uno de los jugadores que mayor rendimiento ha ofrecido en estas últimas temporadas. Además de ser uno de los futbolistas que más minutos disputa por campaña, su presencia sobre el terreno de juego es indispensable para Guardiola. Su regularidad es brutal y la renovación de su contrato era poco menos que una obligación. No existe un solo reparo para su revisión.
Las propuestas están alejadas, pero el margen de negociación todavía es largo. Txiki ya trabaja en busca de soluciones recordando que Pep en su día solicitó que las renovaciones de Alves y Keita estuvieran resueltas antes del inicio de la pretemporada.
El City prepara 50 ‘kilos’
La prensa inglesa sigue dinamitando el mercado de la Premier. En las últimas horas, Alves ha vuelto a acaparar protagonismo. Según una información aparecida en el Sunday Mirror, el Manchester City estaría en condiciones de presentar una gran oferta económica para intentar convencer al jugador y al Barça sobre la necesidad de negociar un traspaso. Las informaciones señalan que el City echaría el resto y solicitaría abrir negociaciones con el Barça con una oferta inicial de 50 millones de euros. Paralelamente, el club inglés también convertiría al lateral derecho en uno de los futbolistas mejor pagados con una cantidad que duplicaría sus actuales emolumentos.
(Fuente sport.es)
El presidente electo del FC Barcelona, Sandro Rosell, habría puesto sus ojos en el jugador del Liverpool Steven Gerrard como una segunda opción en caso que no prospere la negociación por Cesc Fabregas, según informa 'Caughtoffside'.
También comenta que el Barça no seria tan paciente como con Cesc Fàbregas y que el precio de la operación podria rondar los 40 millones de libras esterlinas.
Los dueños del club estarian interesados en conseguir ingresos para renovar la plantilla tras la marcha de Benítez, y Gerrard seria una buena fuente de ingresos para las maltrechas arcas de los 'reds'.
